Hay días para el recuerdo y hay días que no se olvidan. Para la atleta española Natalia Rodríguez este domingo será de los segundos. Tras ganar la final de 1.500 metros en Berlín, la corredora ha sido descalificada. Rodríguez había conseguido la victoria con un tiempo de 4:03:36 pero el roce con la etíope Burka, cuando trató de adelantarla por dentro al entrar en la última curva, y su consiguiente caída, le ha costado la medalla. El equipo español presentó las pertinentes reclamaciones pero la organización no ha querido aceptarlas en virtud del artículo 163.2 del reglamento de la IAAF (Asociación Internacional de la Federación de Atletismo). ¿Conclusión? La española se queda sin oro y el equipo nacional español no sube de los dos metales en su medallero.
Aunque Natalia Rodríguez fue la primera en llegar a la meta, lo hizo consciente de que no tenía la medalla asegurada. Los abucheos del público la advirtieron de lo que finalmente ha pasado. Por eso, la española no quiso saborear la victoria y lo primero que hizo fue ir a ver cómo estaba la atleta que había derribado durante la prueba, ganándose la ovación del público que segundos antes le había dedicado una pitada.
Los hechos fueron así. La catalana intentó adelantar a su rival, la etíope Gelete Burka, por el interior de la pista cuando quedaban200 metros para la línea de meta. Burka se cayó al suelo tras un choque que le costó la descalificación a Natalia Rodríguez convirtiendo así en campeona del mundo a la bahrainí Maryam Yusuf Jamal.
Al término de la prueba, la atleta española Natalia Rodríguez explicó que no había hecho "nada antirreglamentario". "Cuando quería pasar es porque había espacio suficiente para pasar y en cuanto ve (Gelete Burka) que yo paso, se echa a un lado y nos enganchamos. Creo que no es antirreglamentario, pero el estadio se ha vuelto loco y he decidido no dar la vuelta".
Aunque Natalia Rodríguez fue la primera en llegar a la meta, lo hizo consciente de que no tenía la medalla asegurada. Los abucheos del público la advirtieron de lo que finalmente ha pasado. Por eso, la española no quiso saborear la victoria y lo primero que hizo fue ir a ver cómo estaba la atleta que había derribado durante la prueba, ganándose la ovación del público que segundos antes le había dedicado una pitada.
Los hechos fueron así. La catalana intentó adelantar a su rival, la etíope Gelete Burka, por el interior de la pista cuando quedaban
Al término de la prueba, la atleta española Natalia Rodríguez explicó que no había hecho "nada antirreglamentario". "Cuando quería pasar es porque había espacio suficiente para pasar y en cuanto ve (Gelete Burka) que yo paso, se echa a un lado y nos enganchamos. Creo que no es antirreglamentario, pero el estadio se ha vuelto loco y he decidido no dar la vuelta".
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