Perú volvió a la vida con un dramático gol que le permitió sumar este domingo su primer triunfo en el Sudamericano Sub-17 de Chile. Los jóvenes incaicos se impusieron a Bolivia, y de esta manera mantuvieron intactas sus chances de clasificación, mientras que redujeron considerablemente las de los verdes.
El empate clasificaba a Bolivia al cuadrangular final, pero un triunfo hubiese dejado a los de Oscar Villegas muy cerca del pase directo al Mundial. Finalmente esa ambición ofensiva terminó pagándola caro, y Perú se llevó todo en una jugada fuera de contexto.
El primer tiempo había sido en líneas generales mediocre, con una Bolivia que tenía algo más de claridad para manejar la pelota y no se libraba tanto a arrestos individuales, el caso del equipo de Juan José Oré. Las ocasionales subidas de Mendoza y Borba, y principalmente las de Fran Parada, ponían en alerta al inseguro arquero Falcón. Pero el cero no se movió.
En la segunda mitad Perú logró irse al frente en el marcador luego de que Johan Rey encarara a tres defensores y generara un tan infantil como evidente penal, que Renato Zapata se encargó de transformar en gol, colocando el balón cerca del ángulo superior izquierdo de Pedro Lusquiño.
A partir de ese momento se acentuó el dominio boliviano, con el manejo de Samuel Galindo y las arremetidas de Gilbert Álvarez, pero el empate llegaría en una jugada a balón parado.
Tras un tiro libre lejano desde la banda zurda, el defensa Alejandro Méndez cabeceó la pelota al fondo de la red anticipándose a la mala salida de Falcón, a 17 minutos del final.
Perú debía jugarse el todo por el todo, ya que ese resultado lo dejaba automáticamente fuera de toda posibilidad de llegar a Nigeria. Sin embargo fue Bolivia la que estuvo más cerca de llevarse el triunfo, hasta que llegó el milagroso minuto 89.
El volante Jordan Ccapacca metió un pase aéreo a la medialuna, y Deyair Reyes aprovechó la horrenda salida de Lusquiño para tocar por encima del arquero y celebrar el angustioso triunfo.
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